Con más de 150 días de templos cerrados el pedido por parte de las iglesias cristianas de Ayacucho es más incesante teniendo en cuentan que en otros municipios de la región lograr abrir con rigurosos protocolos preventivos.
Muchos plantean que la necesidad mental y espiritual es necesaria para continuar luchando contra las negativas que deja esta pandemia en cada familia.
Iglesias evangélicas mantuvieron una comunicación con los integrantes del comité de crisis, donde no solo plantearon la necesidad de abrir si no presentaron protocolos que se ejecutan en otros lugares como por ejemplo en Olavarría que a pesar de estar en la misma fase pueden abrir.
Plantearon por que permiten en una bar o confitería que se junten varias personas por mesa y no dejen que dentro de un lugar -donde la situación también se puede controlar- pueda haber reuniones con un número de fieles reducido.
Si el Intendente Cordonnier escucha el pedido de los líderes religiosos, tomarían medidas de distanciamiento, con poca capacidad de personas por reunión o misa y con las medidas de higienes pertinentes, sostuvieron.
Actualmente en nuestra comunidad se permiten actividades religiosas individuales de lunes a domingo de 08:00 a 19:00 horas.