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Ciberdelincuentes hacen pública la información obtenida a partir del hackeo al PAMI

En un impactante suceso que ha sacudido al sistema de salud argentino, el Programa de Atención Médica Integral (PAMI) se ha convertido en la última víctima de un ciberataque. El pasado 2 de agosto, un grupo cibercriminal autodenominado “Rhysida” llevó a cabo un hackeo masivo a los sistemas del programa, comprometiendo la seguridad y la confidencialidad de alrededor de 1.6 millones de afiliados. Los piratas informáticos lograron obtener un colosal volumen de información, que incluye desde datos personales hasta historias clínicas, y amenazaron con revelarla a menos que se les pagara un rescate en criptomonedas.
El grupo Rhysida empleó una táctica temible: depositaron un ransomware, una forma de virus que cifra los archivos de las víctimas y los hace inaccesibles, exigiendo una recompensa en Bitcoin. La suma requerida ascendía a 25 BTC, lo que equivale a aproximadamente 647 mil dólares estadounidenses o una asombrosa suma de 472.310.000 millones de pesos argentinos en la fecha de la solicitud. Sin embargo, la resistencia a ceder ante el chantaje cibernético por parte de PAMI fue firme y se negó a pagar el rescate.
Este incidente provocó que alrededor de 1.6 millones de archivos, con un tamaño total de 831 GB, fueran filtrados en la dark web por los ciberdelincuentes, arrojando una sombra de incertidumbre sobre la seguridad de los datos de los afiliados. Información sensible como historias clínicas, estudios médicos, presupuestos y detalles de proveedores se encuentran ahora en peligro, exponiendo a los afectados a riesgos de robo de identidad y otros crímenes cibernéticos.
A raíz de esta intrusión, PAMI tomó medidas inmediatas para limitar el acceso a sus sistemas, provocando la caída de sus plataformas durante dos días. A través de un comunicado, la obra social expresó: “Queremos informarles que los sistemas de PAMI han experimentado un ciberataque que ha afectado temporalmente el servicio. El ataque ha sido mitigado y toda la información de nuestros servidores se encuentra resguardada y protegida”.
Durante este período de vulnerabilidad, donde los jubilados y afiliados podrían estar sufriendo la filtración de sus datos personales, PAMI ha emitido una serie de recomendaciones críticas para aquellos que necesiten realizar trámites. Se aconseja a los usuarios que se manejen exclusivamente a través de canales oficiales, evitando brindar información confidencial o contraseñas por teléfono. Además, se hace un llamado a prestar atención al remitente de los correos electrónicos, asegurándose de que provengan de direcciones legítimas como “@pami.org.ar”, y se insiste en no divulgar información sensible bajo ninguna circunstancia.