A partir de este viernes, Ayacucho contará con un nuevo espacio de contención emocional gracias a la iniciativa de Fabiana Acosta, vecina de la ciudad. El grupo, denominado “Ayúdame que te ayudo”, está orientado a personas que enfrentan dificultades como depresión, ataques de pánico u otros trastornos similares.

La primera reunión se llevará a cabo este viernes a las 16 horas en la sede del barrio Fonavi, y contará con la presencia de profesionales de la salud. Entre ellos, la médica generalista Teresita Echeverry, quien participará de forma presencial, y la psicóloga María José Gómez, que brindará su apoyo virtualmente. Ambos profesionales colaboran de manera gratuita, fortaleciendo la propuesta de Fabiana de generar un espacio inclusivo y de ayuda mutua.

El origen de esta iniciativa surge de la propia experiencia de Fabiana, quien compartió que atravesó momentos difíciles que la llevaron a estar internada en una clínica psiquiátrica hace un año. Durante ese proceso, contó con el apoyo de su familia y desarrolló una mayor comprensión sobre la importancia de buscar ayuda, reconocer las problemáticas emocionales y tratarlas de manera adecuada.

“Quiero ayudar a quienes están pasando por lo que yo viví o quizás peor. Esto nació de mi corazón y espero que sea útil para muchos”, expresó Fabiana, destacando que la pandemia intensificó los problemas emocionales en la sociedad, lo que motivó aún más su decisión de formar este grupo.

“Ayúdame que te ayudo” funcionará, en principio, todos los viernes y está abierto a personas de cualquier credo o condición social. No está vinculado a ninguna religión ni institución específica, y su finalidad es brindar un espacio seguro y de escucha. Además, quienes lo necesiten podrán sumarse a un grupo de WhatsApp donde se fomenta el contacto personal y confidencial para brindar apoyo en momentos críticos.

Para más información o para sumarse al grupo, los interesados pueden comunicarse al teléfono de Fabiana Acosta: 2494-578641. Este nuevo espacio se presenta como una oportunidad para construir lazos solidarios y enfrentar juntos los desafíos emocionales.