El Concejal Pablo Aguiar, representante del PJ/ Unión por la Patria, ha vuelto a poner sobre la mesa el tema de discusión: el rol del Estado y su política industrial. En lugar de enfocarse únicamente en la venta de una planta fabril, Aguiar insta a analizar el sistema en su totalidad y evitar caer en la tentación de atacar singularidades.
Aguiar argumenta que el síntoma visible, en este caso, es la venta de la fábrica de helados, pero la verdadera enfermedad radica en la falta de una política industrial sólida y el desinterés genuino por parte del Estado. Hace hincapié en que el Intendente Emilio Cordonier ha estado en la conducción de la administración municipal durante 12 años, ocupando diferentes cargos políticos, lo cual evidencia que no se trata de novatos en la gestión y ejecución política.
El Concejal expresa su cansancio y frustración al escuchar al Intendente Cordonier hacer mención constante a posibles ataques políticos y promesas sin fundamentos. Además, insta a desplazar el enfoque hacia las políticas públicas, que son fundamentales para lograr un futuro próspero e inclusivo para todos.
Señala que los ciudadanos eligieron a las autoridades actuales hace 12 años con la esperanza de que lideraran el camino hacia la diversificación económica y la generación de empleo. Sin embargo, según Aguiar, han fracasado en ese objetivo. El tiempo transcurrido, tanto en la vida de una persona como en la administración política, es considerable, y el concejal argumenta que lo que no se hizo en 12 años resulta difícil de lograr en períodos más cortos.
El Concejal plantea interrogantes sobre la planificación, el compromiso y el acompañamiento que el Intendente Cordonier ha brindado al desarrollo industrial de la región. Destaca que la generación de empleo es un tema complejo de abordar, y muchas veces no se le otorga la atención necesaria en la agenda política.
Aguiar también reflexiona sobre el perfil del Intendente Cordonier y su estilo de gobierno, caracterizado por la concentración de poder y responsabilidades en sus manos. Sugiere que su enfoque se asemeja más al de un administrador o gerente de recursos humanos, en detrimento de considerarse un verdadero sujeto político. Aguiar señala que esta actitud desestima la importancia de la cultura política para lograr un crecimiento inclusivo en la comunidad.
En última instancia, resalta que el estado municipal se ha convertido en el principal generador de empleo, lo cual indica que el gobierno local no ha logrado impulsar el desarrollo industrial deseado.
