Después de muchas idas, vueltas y especulaciones, finalmente este miércoles el Gobierno anunciará un bono de fin de año para los trabajadores del sector privado que tengan bajos ingresos.
Para el caso de los trabajadores en relación de dependencia, el bono sería de $20.000, para quienes ganen hasta $180.000 mensuales; mientras que a los beneficiarios de Potenciar Trabajo el Gobierno les otorgaría un extra de $13.500.
Con esta medida, el Gobierno pretende que los trabajadores recuperen algo de poder adquisitivo, el cual se ha visto afectado severamente este año a causa de la inflación, que hasta octubre acumuló una suba anual del 76%.
Según se pudo conocer, el pago de la bonificación estará exceptuado del Impuesto a las Ganancias, y lo asumirán las empresas, mientras para el caso de las pymes, la mitad de lo que pague cada negocio podrá ser deducible 100% de Ganancias.
Los trabajadores en relación de dependencia recibirán el extra junto con el pago del aguinaldo que se otorga en este mes; mientras que los titulares de Potenciar Trabajo lo percibirán entre las fiestas de Navidad y Fin de Año.
La medida alcanzaría a 4,4 millones de personas aproximadamente, entre trabajadores y beneficiarios sociales, estos últimos deberán realizar la correspondiente validación de su identidad para poder recibir el pago.
Los reclamos de las organizaciones sociales
Mientras el Ejecutivo planea anunciar un bono para titulares de Potenciar Trabajo por $13.500, los beneficiarios del programa aseguran que es una cifra insuficiente, pues exigen que dicho bono equivalga al mismo valor del haber que se les otorga cada mes.
Por ello, este miércoles se llevarán a cabo protestas en las principales vías de acceso a la Ciudad de Buenos Aires, pues las organizaciones sociales le exigen al Gobierno que le dé prioridad a los programas sociales y, al contrario, no los ajuste más.