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El Vaticano confirmó la beatificación del empresario argentino Enrique Shaw
El Papa Francisco aprobó el decreto que reconoce el milagro atribuido al empresario Enrique Ernesto Shaw, primer laico argentino y dirigente empresarial que será declarado beato. La decisión fue anunciada este miércoles junto con el reconocimiento de once mártires españoles de la Guerra Civil y el avance de otras tres causas de canonización.
Un laico y empresario camino a los altares
El Vaticano confirmó que el Papa autorizó la promulgación del decreto que reconoce el milagro atribuido a Enrique Ernesto Shaw, un paso clave que habilita su beatificación. La noticia fue comunicada oficialmente por el Dicasterio para las Causas de los Santos.
Shaw, empresario, esposo, padre de nueve hijos y oficial de la Armada, murió en 1962. Es considerado un referente social y religioso por su visión humanista de la economía y su compromiso con la dignidad del trabajo. Será el primer empresario argentino elevado a los altares.
Repercusiones en Argentina
La Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE) y Acción Católica Argentina (ACA), impulsoras de la causa, celebraron la decisión papal.
“La beatificación de Enrique Shaw brindará al mundo el ejemplo de un empresario santo y una invitación urgente a humanizar la economía”, afirmó Silvia Bulla, presidenta de ACDE.
Claudia Inzaurraga, titular de ACA, destacó su compromiso social: “Vivió su fe con valentía, generando comunidad en su entorno laboral y social”.
Trayectoria y legado social
Nacido en París en 1921 y radicado desde niño en Argentina, Shaw impulsó el salario familiar para proteger a los trabajadores con hijos y promovió relaciones laborales basadas en el diálogo y la justicia. Fue fundador y primer presidente de ACDE, desde donde difundió la Doctrina Social de la Iglesia en el ámbito empresario.
Su biografía incluye un episodio emblemático: durante su lucha contra el cáncer, obreros de su empresa donaron sangre para sostener su tratamiento. Shaw interpretó el gesto como un símbolo de unidad y justicia laboral.
Otras causas aprobadas
El decreto papal también reconoció el martirio de once religiosos españoles asesinados entre 1936 y 1937, y las virtudes heroicas de los venerables Berardo Atonna, Domenica Caterina dello Spirito Santo y Joseph Panjikaran
