En un encuentro fortuito entre Elon Musk y Demis Hassabis, cofundador de la empresa de inteligencia artificial DeepMind, se pusieron en primer plano los riesgos potenciales de la inteligencia artificial (IA) en futuras colonias de Marte.
Al parecer, Musk se quedó estupefacto cuando el otro aspirante a gurú de la IA señaló un fallo básico en su publicitado plan de colonización.
Como informa el New York Times basándose en algunas entrevistas internas, Demis Hassabis y Musk empezaron a hablar del Planeta Rojo poco después de conocerse en 2012 en una conferencia que había organizado su inversor común, el fundador de PayPal Peter Thiel.
La visión de Musk de colonizar Marte para salvaguardar a la humanidad chocó contra la perspectiva cautelosa de Hassabis de que la introducción de IA en tales colonias podría conducir a su propio declive.
Al parecer, Hassabis era muy hábil convenciendo a empresarios millonarios para que financiaran su sueño de crear inteligencia artificial general y su interacción con Musk no fue diferente.
Durante una visita en la sede de SpaceX, el multimillonario de origen sudafricano empezó a alardear de sus planes de llevar a la humanidad a Marte para escapar de la superpoblación mundial.
Hassabis estuvo de acuerdo en todo el relato del empresario, con una salvedad: si la IA superara la inteligencia humana, podría seguirnos fácilmente fuera del planeta y matarnos allí también.
Musk se quedó “sin palabras”, según el NYT, al parecer sin haber considerado que los problemas terrestres podrían seguir a los humanos hasta Marte.
La reunión con Hassabis, aparentemente, afectó el enfoque de Musk hacia la IA, lo que lo llevó a invertir en DeepMind, junto con el cofundador de PayPal, Peter Thiel. Sin embargo, años más tarde acabó destrozando la empresa, calificándola de su “principal preocupación”.
Una voz contra la inteligencia artificial
Desde entonces, Musk se ha convertido en una voz destacada que plantea preocupaciones sobre los peligros potenciales de la IA.
Sus llamados a la supervisión regulatoria se destacaron durante una reunión de accionistas de Tesla, donde enfatizó la necesidad de una autoridad para supervisar el desarrollo de la IA
“La naturaleza de la IA que están construyendo es tal que aplasta a todos los humanos en todos los juegos”, dijo Musk a Maureen Dowd del Times en 2020, refiriéndose a las primeras innovaciones de la empresa en IA que pueden superar a los humanos en los videojuegos de la vieja escuela.
El intercambio, que Hassabis también relató al biógrafo de Musk, Walter Isaacson, es sorprendente no sólo porque es hilarante imaginar al famoso magnate sin palabras, sino también porque muestra otro agujero en su viejo sueño de colonizar Marte.
Aunque es ciertamente optimista esperar que en el Planeta Rojo se alivie el sufrimiento de la Tierra, no hay ninguna razón por la que cosas como los virus, los robots asesinos o la guerra nuclear no puedan simplemente unirse a nosotros en nuestro vecino planetario, y en 2012, al menos, Musk aparentemente nunca había considerado esa posibilidad.