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Esperanza tras el incendio: Thiago y Ámbar muestran signos de mejoría y la familia agradece el apoyo

En la madrugada del pasado sábado, un voraz incendio afectó una vivienda situada en calle Berra al 1700, en un terreno que alberga tres departamentos. Según las primeras versiones, el siniestro se habría iniciado por la caída accidental de una vela encendida, lo que provocó la rápida combustión de materiales inflamables en el interior del inmueble.
En el momento del incendio se encontraban dentro de la casa dos menores, Thiago y Ámbar, ambos de seis años, quienes lograron ser rescatados a tiempo por su madre, Lucía Cruz. Los niños fueron asistidos de inmediato y trasladados de urgencia al Hospital Municipal debido a la inhalación de humo, mientras que la madre también recibió atención médica y se encuentra estable.
Dada la gravedad del cuadro, los pequeños fueron derivados a un centro de mayor complejidad en Mar del Plata, donde permanecen internados bajo estricta observación. Según informaron allegados a la familia, Ámbar evoluciona favorablemente, ya respira con oxígeno común y se encuentra lúcida y tranquila. Thiago, en tanto, continúa entubado, pero muestra signos de mejoría paulatina.
La familia expresó su profundo agradecimiento a los vecinos y a toda la comunidad, quienes organizaron donaciones para ayudar a paliar los daños materiales y cubrir necesidades urgentes.
“Estamos enfocados totalmente en la recuperación de los chicos. La casa se reconstruirá más adelante; ahora solo importa que ellos salgan adelante”, señalaron familiares cercanos.
Mientras tanto, Lucía permanece acompañada por seres queridos y recibe el apoyo constante de la comunidad. En Ayacucho, vecinos y allegados continúan organizando gestos solidarios y cadenas de oración para la pronta recuperación de Thiago y Ámbar.
La familia hizo saber que, por el momento, no se requieren más donaciones materiales, pero agradecen cada muestra de apoyo que recibieron en este momento tan difícil.
La solidaridad y el compromiso vecinal vuelven a poner de manifiesto la unión de Ayacucho ante las adversidades, reflejando una vez más la fuerza de la comunidad cuando más se la necesita.