El 30 de agosto se conmemora en Argentina el Día del Ferrocarril, una fecha que celebra la inauguración de la primera línea ferroviaria del país en 1857, uniendo la actual Plaza Lavalle de Buenos Aires con la estación La Floresta. Este hito marcó el inicio del sistema ferroviario nacional, siendo la emblemática locomotora “La Porteña” la protagonista de aquel histórico viaje.
En Ayacucho, la restauración de una antigua locomotora inglesa ubicada en el Museo Histórico Regional es el centro de un proyecto que busca recuperar parte de la historia ferroviaria local. Liderado por la Asociación Civil del Ferrocarril Turístico y Comunitario, este trabajo, que lleva años, se enfrenta a múltiples desafíos, pero mantiene firme el objetivo de poner en valor esta pieza patrimonial.
En diálogo con Nueva Ciudad, programa de Radio Ayacucho, el Licenciado Franco Mateo, miembro de la Asociación, explicó los avances y las dificultades de este emprendimiento, destacando que el proceso ha sido más lento de lo esperado debido a la falta de fondos y la dificultad para obtener repuestos. “La locomotora tiene partes y componentes difíciles de conseguir o fabricar, ya que fue construida hace aproximadamente 130 a 140 años“, explicó.
Un proyecto de largo aliento con impacto en la comunidad
La Asociación ha trabajado de la mano con las autoridades locales para avanzar en la restauración. “El objetivo principal es restaurar la caldera y otras partes clave de la máquina, para que vuelva a estar operativa”, comentó. A pesar de los desafíos financieros, el proyecto sigue en marcha, con la esperanza de convertir esta locomotora en un atractivo turístico que conecte Ayacucho con Tandil y localidades intermedias.
El Licenciado Mateo también recordó la importancia del ingeniero galés que, desde 2014, lideró el equipo técnico. Su fallecimiento en 2022 fue un golpe significativo para el proyecto. “Él derramó muchísimo conocimiento en el equipo. Su pérdida retrasó el avance, pero seguimos con su legado y con la visión de ver esta locomotora en funcionamiento nuevamente”, expresó.
Un futuro turístico para la región
La Asociación sueña con que la locomotora no solo vuelva a andar, sino que forme parte de un plan turístico regional. “Queremos darle a la locomotora un rol turístico que revitalice nuestra ciudad y las localidades cercanas“, señaló Mateo. Además, destacó que la restauración de la locomotora podría revalorizar la historia ferroviaria y generar beneficios para las economías locales.
“Es un proyecto multidimensional”, agregó Mateo, subrayando que su impacto va más allá de Ayacucho, ya que incluye a varias localidades cercanas que podrían beneficiarse del turismo ferroviario.
Esperanzas y desafíos por delante
A pesar de las dificultades económicas y la complejidad técnica, el Licenciado Mateo y la Asociación Civil del Ferrocarril Turístico y Comunitario siguen comprometidos con el proyecto. “Sabemos que el camino no es fácil, pero estamos convencidos de que la restauración de esta locomotora aportará mucho a la ciudad y a la región”, aseguró.
Con la vista puesta en el futuro, Mateo expresó su deseo de que pronto se puedan reunir los recursos necesarios para avanzar más rápido en la restauración y cumplir el sueño de ver la locomotora inglesa en movimiento nuevamente.