La Cámara de Diputados de Argentina ratificó el veto presidencial a la ley de financiamiento universitario, en una votación que se extendió durante cuatro horas. La oposición no alcanzó los dos tercios necesarios (166 votos), obteniendo solo 159 votos a favor de bloquear el veto. El presidente Javier Milei contó con el respaldo de 85 legisladores. Hubo cinco abstenciones, cuatro de ellas de Innovación Federal y una del radical Pablo Cervi. Ocho diputados estuvieron ausentes por licencia o viajes.
En la sesión del Honorable Concejo Deliberante (HCD) de Ayacucho, la edil radical Cintia Giardini criticó duramente la ratificación del veto. En su discurso, expresó su preocupación por la medida y sostuvo que aquellos que históricamente defendieron la educación, como su partido, el radicalismo, se sienten decepcionados por la actitud de los legisladores que apoyaron el veto.
Giardini destacó la importancia de la educación pública como un derecho garantizado, que permite el ascenso social y es clave para la formación de profesionales en diversas áreas, como la medicina, el derecho, la ciencia y la tecnología. Rechazó los argumentos del presidente sobre presuntas irregularidades en las universidades públicas, instándolo a presentar pruebas y mecanismos de control, en lugar de desprestigiar la educación pública.
Finalmente, Giardini instó a los legisladores a reconsiderar su compromiso con la educación y a los ausentes a evaluar si están cumpliendo con sus responsabilidades como representantes elegidos por el pueblo.