El 31 de octubre se celebra Halloween en muchos países del mundo, una fiesta que se ha difundido de forma creciente en las últimas décadas y que ha ganado cada vez más seguidos con el correr del tiempo.

Antiguamente los pueblos celtas a menudo realizaban una gran ceremonia a fines de octubre para conmemorar el final de la cosecha.

Esta fiesta fue bautizada con la palabra gaélica de Samhain, cuyo significado etimológico es el final del verano y se debe a que durante esta celebración se despedían de Lugh, dios del Sol. Los celtas creían que en Samhain los espíritus de los muertos regresaban a visitar el mundo de los mortales.

DULCE O TRUCO

Esta tradición comenzó en Reino Unido e Irlanda. La gente iba de casa en casa haciendo “souling”, o sea pidiendo panes pequeños llamados “pasteles del alma” a cambio de una oración. Los adultos también tocaban puerta por puerta pidiendo comida y bebida a cambio de una canción o baile.