La Biblioteca Pública Municipal y Popular “Manuel Vilardaga” brinda un sin fin de servicios y posibilidades, no sólo en la ciudad sino también en la zona rural donde transporta a todas las escuelas rurales del distrito a través del Bibliomóvil, esta unidad dotada para llevar un “resumen” de la Biblioteca al campo mismo.
En diálogo con Prensa Municipal, la Prof. Bárbara Russo, que es una de las docentes que a diario concurren a las escuelas de campo junto a Sofía Labour, quien se encarga de narrar ante cada visita, contó detalles de lo que representa este fundamental aporte educativo y cultural, que arrancó un nuevo período lectivo la semana pasada
“Comenzamos el pasado martes a salir a las escuelas, con los cronogramas semanales. Salimos de lunes a jueves, haciendo una escuela por día, donde nuestra actividad principal es acercarle el libro al lector. La idea es que aprovechen fundamentalmente todos los chicos, con trabajos de narración además de hacer actividades. Este año las actividades están enmarcadas como eje en la cultura. Y desde el Bibliomóvil nos sumamos para trabajar con escritores argentinos”.
“Buscamos actividades donde se pueda abarcar un todo, y además los invitamos a que exploren los libros, para que se acerquen a la lectura”, señaló la docente apuntando sobre los objetivos que se persiguen.
Dado que las escuelas que recorren presentan una amplia diversidad de edades, necesariamente es fundamental trabajar con una adaptación del material. “Tenés escuelas que son solo primarias pero también, como por ejemplo en La Constancia, tenés el nivel Secundario, o modalidades de Jardín de Matrícula reducida. Vamos adaptando las actividades en base a las edades. Y con las escuelas secundarias, después de Vacaciones de Invierno se irá con actividades puntuales porque son más difíciles de atrapar. En Jardín buscamos añadir mayormente la parte lúdica, si podemos llevar títeres lo hacemos. Queremos en ese caso, como son escritores argentinos, trabajar un cuento e ir disfrazadas, como parte de algunas de las ideas que tenemos”, remarcó Bárbara Russo.
Tantos años han pasado desde que comenzó esta actividad, que ya se ha convertido en una verdadera tradición para el sector rural fundamentalmente. “No hay escuela que no te reciba con los brazos abiertos. Es increíble cómo te hacen sentir, es toda una satisfacción. El contacto con los chicos es mucho más fuerte, es muy linda experiencia”, expresaron las encargadas de trasmitir el fundamento esencial de la lectura.
El Bibliomóvil nació hace veinticuatro años, con el fin de acercar el libro y la lectura, a través de distintas actividades recreativas, tales como, narraciones de cuentos y juegos educativos, a los chicos que se encuentran en zonas alejadas de la biblioteca. Como todos los años, este puente de extensión cultural emprende nuevos desafíos.
