En el barrio Don Virgilio en Quilmes, vecinos denuncian el constante robo de cables en la zona. En esta ocasión quedó registrado y quien filmaba no intervino ya que en otras ocasiones sufrieron amenazas de parte de los delincuentes.
Este hombre no actuó solo sino que iba acompañado de menores.
El cobre, el bronce, y el aluminio, encabezan las preferencias de los ladrones, que no distinguen entre placas conmemorativas en las bóvedas de los cementerios, porteros eléctricos, o tendidos telefónicos.
Los chatarreros llegan a pagar $500 el kilo de cobre y es una práctica que volvió a crecer en los últimos meses.