FV, una reconocida empresa de grifería, ha decidido suspender a 600 empleados de su planta en Pilar durante casi un mes debido a la fuerte caída en la construcción, lo que ha afectado gravemente a las empresas proveedoras del sector.

La compañía informó que la mayoría de los trabajadores suspendidos están asignados a las líneas de producción para el mercado doméstico, el cual ha sido severamente afectado por la recesión económica. En cambio, aquellos dedicados a la manufactura de productos para exportación continuarán con sus actividades normales.

El cronograma de suspensiones comenzará este mes y se extenderá hasta julio, sumando un total de 26 días: 10 días en mayo, 7 en junio y 9 en julio. Durante este período, los empleados afectados recibirán el 80% de su sueldo neto.

La producción de insumos para la construcción ha sido uno de los sectores más afectados por la recesión, con una caída del 42,9% en los despachos de cemento en lo que va del año. El Índice Construya, que mide la venta de insumos para la construcción, también registró una disminución del 40%.

Los datos indican caídas significativas en diversos insumos de la construcción: 46,1% en hormigón elaborado, 43,7% en ladrillos huecos, 43,1% en cemento Portland, 41,6% en mosaicos graníticos y calcáreos, 40,5% en cales, 38,2% en pisos y revestimientos cerámicos, 37,7% en artículos sanitarios de cerámica, 32,8% en otros insumos (incluyendo grifería, tubos de acero sin costura y vidrio para construcción) y 24% en pinturas para construcción.

El ingeniero mecánico Esteban Igarza, quien trabaja en FV desde hace 17 años, describió la situación en una entrevista con FM 95 de Ayacucho. Igarza, oriundo de Labardén, explicó que la caída en las ventas comenzó a notarse en enero de este año y ha ido empeorando. “Las ventas no son las que deberían ser, y la empresa, junto con el gremio y el Ministerio de Trabajo, tuvo que decidir la suspensión de los trabajadores“, afirmó.

Igarza también comentó sobre el impacto emocional y operativo de la suspensión. “Es muy triste ver casi toda la planta apagada. Trabajamos diariamente unas 1200 personas y ahora solo queda personal de servicio, jerárquico y un pequeño porcentaje de producción“, detalló.

A pesar de la difícil situación, Igarza destacó el compromiso de la empresa con sus empleados. FV, conocida por cuidar a su personal, ha mantenido un plantel estable a lo largo de los años, ofreciendo beneficios como bonos y celebraciones de fin de año. “Es una empresa tecnológicamente avanzada que siempre ha pensado mucho en el recurso humano“, añadió.

El ingeniero expresó su agradecimiento hacia FV y su esperanza de que la situación mejore pronto. “No sabemos si más adelante nosotros mismos seremos suspendidos. El panorama es oscuro, pero FV siempre ha cuidado a su gente“, concluyó.