El poder de compra de los argentinos en relación con productos tecnológicos de uso masivo, como una notebook, un celular o un Smart TV, es uno de los más bajos de América Latina, al punto que deben trabajar el doble que un uruguayo o el triple que un chileno para adquirir algunos de esos artículos.
La situación desfavorable del consumidor argentino respecto de los de los del resto de los países de la región, con excepción de Venezuela, es consecuencia del “menor nivel de oferta y producción, incrementos de costos, situación estructural de provisión de insumos y desequilibrio macroeconómico local”, según el análisis de la consultora Focus Market.
La entidad comprobó que un argentino necesita trabajar 105 días para comprar una notebook de 15,6 pulgadas, mucho menos que los 531 días requeridos en Venezuela, pero más que los 91 días necesarios en Brasil, 76 en Paraguay, 62 en Bolivia, 51 en Uruguay y 50 días en Chile.
El alto componente importado de la mayoría de los productos tecnológicos afecta por lo general al poder adquisitivo de la población de los países con monedas depreciadas respecto del dólar, como es el caso de la Argentina.
Al respecto, el director de Focus Market, Damián Di Pace, señaló que “los salarios medios de los argentinos medidos en dólares han recuperado terreno frente al 2020 debido a una apreciación del tipo de cambio oficial frente a la evolución de la inflación”, luego de la pérdida de terreno que hubo en los años previos.
“Sin embargo, los precios domésticos de los bienes durables en la canasta de productos considerada en este informe, han tenido aumentos interanuales promedio del 75% muy por encima de la evolución del salario promedio en ese mismo período que ha sido en el orden del 43%”, acotó.