Nacionales
Murió el genocida Miguel Etchecolatz
Uno de los más feroces torturadores de la dictadura.

El represor Miguel Etchecolatz murió hoy a los 93 años y cumpliendo condena en una cárcel común. La noticia dejó un sinsabor en familiares, amigos y organismos de derechos humanos que continúan comprometidos por saber la verdad sobre la desaparición de Jorge Julio López, el albañil y militante que fue secuestrado y torturado durante la última dictadura militar y que acusó al ex jefe de Operaciones de la Policía Bonaerense por delitos de lesa humanidad.
Entre 1976 y 1979, Etchecolatz estuvo al frente de la Dirección General de Investigaciones de la Policía Bonaerense, la fuerza que comandaba con mano ensangrentada Ramón Camps. Bajo su órbita funcionaron no menos de 20 centros clandestinos de detención, tortura y exterminio y otras tantas maternidades clandestinas, donde las mujeres que estaban secuestradas parían y les eran arrebatados sus hijos o hijas.
Etchecolatz fue un firme seguidor de Camps, tanto que, por esos años, recibió varias veces el reconocimiento San Miguel Arcángel con el que la Bonaerense premiaba a sus mejores hombres –que, para entonces, eran quienes mostraban más arrojo a la hora de empuñar la picana.
Jorge Julio López fue secuestrado y desaparecido por primera vez durante la noche del 27 de octubre de 1976, en medio de un operativo represivo que se llevaba a cabo en la localidad platense de Los Hornos, junto a otros militantes peronistas. Los grupos de tareas (GT) desplegados ese día estaban al mando de Etchecolatz, por ese entonces director de Investigaciones de la Policía Bonaerense y hombre de extrema confianza del jefe de la fuerza, coronel Ramón Camps.