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Día de la Madre: ¿De donde surgió la festividad?

El Día de la Madre es una de las festividades más significativas en Argentina, celebrada tradicionalmente el tercer domingo de octubre. Es una ocasión para rendir homenaje a las madres, reconociendo su rol esencial en la familia y la sociedad. Este día especial busca valorar el amor, los sacrificios y la dedicación de quienes ejercen la maternidad en sus diversas formas.
Origen y Evolución de la Celebración
El Día de la Madre tiene raíces históricas profundas. A nivel mundial, la celebración se vincula a diversas culturas antiguas. En la Antigua Grecia, por ejemplo, se rendía culto a Rea, madre de los dioses. En Roma, se celebraba la “Hilaria”, una festividad dedicada a Cibeles, diosa de la fertilidad. Estas celebraciones paganas tenían en común el reconocimiento de la maternidad y la fertilidad como pilares fundamentales de la vida.
En el ámbito cristiano, la Virgen María, madre de Jesús, ha sido durante siglos una figura de devoción especial. Durante la Edad Media, la Iglesia Católica promovió festividades para honrar a la Virgen María, lo que sentó las bases para las actuales celebraciones del Día de la Madre en varios países de tradición cristiana.
El Día de la Madre en Argentina
La celebración en Argentina comenzó a institucionalizarse en el siglo XX, siguiendo una tendencia internacional que surgió en Estados Unidos. En 1908, Anna Jarvis impulsó en ese país la primera celebración formal del Día de la Madre en honor a su propia madre, una activista comunitaria. En 1914, el entonces presidente estadounidense Woodrow Wilson oficializó el segundo domingo de mayo como el Día de la Madre en todo el país. Esta fecha fue adoptada por muchos países alrededor del mundo, aunque Argentina optó por un calendario distinto.
En sus inicios, el Día de la Madre en Argentina se celebraba en diferentes momentos del año, pero en 1931, por decisión de la Iglesia Católica, se fijó para el mes de octubre. Esto coincidía con la festividad de la Maternidad de la Virgen, que se conmemoraba el 11 de octubre. Aunque la Iglesia más tarde trasladó esta festividad al 1 de enero, Argentina mantuvo la costumbre de celebrar el Día de la Madre en octubre, lo que distingue al país de otras naciones.