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Estado de las rutas en Ayacucho: Que dijo Kicillof

En su reciente visita a Ayacucho, el gobernador Axel Kicillof fue consultado nuevamente sobre el estado de las rutas que conectan con la ciudad, como la Ruta 50, Ruta 29 y Ruta 74. El interés en este tema fue especialmente relevante dado que el gobernador tuvo que aterrizar en Dolores y trasladarse por ruta hasta Ayacucho, debido a las condiciones climáticas que no le permitió llegar en avión.
Kicillof abordó el estado actual de las rutas y las inversiones necesarias para su mejora. Reconoció que la situación de las infraestructuras viales en Ayacucho es deficiente, señalando que durante su gestión anterior se batieron récords en la cantidad de rutas arregladas, aunque admitió que se partió de una situación comprometida. Además, aclaró que nunca se ha quejado de la “pesada herencia” recibida, sino que se centró en describir la situación real y en trabajar en mejoras, incluyendo caminos rurales, centros de salud y escuelas.
El gobernador también destacó los desafíos financieros que enfrenta la provincia, atribuyendo parte de las dificultades a las políticas del gobierno nacional. Criticó el recorte de recursos y la disminución de la coparticipación, lo cual ha afectado la capacidad de recaudación local y provincial. Kicillof mencionó que la reciente devaluación ha encarecido los costos de obras públicas, especialmente aquellas vinculadas a la infraestructura vial, dado que muchos insumos están dolarizados.
A pesar de los retos, aseguró que la provincia sigue adelante con proyectos de construcción de viviendas y otras obras públicas, aunque con mayores costos y plazos extendidos. Expresó su preocupación por el impacto de las políticas económicas nacionales en los sectores más vulnerables, sugiriendo que el ajuste económico afecta directamente a la población a través de aumentos en precios de bienes esenciales como alimentos y medicamentos.
Finalmente, Kicillof subrayó que el gobierno provincial está comprometido en continuar con las obras necesarias para mejorar las condiciones de vida en Ayacucho y en toda la provincia, a pesar de las restricciones financieras y los desafíos políticos.