Días atrás un sujeto quedó imputado por un supuesto caso de grooming, donde es acusado de solicitar imágenes y contenido inapropiado a una menor de 8 años. La PFA allanó el comercio donde trabaja y su vivienda, secuestrando elementos de tecnología para determinar el hecho.

La noticia alarmó a toda la comunidad, e incluso para aquellos que desconocían el término del delito informático.

En exclusivo de Urgente Ayacucho, logramos dialogar con la mamá de la menor que denunció el hecho a mediados de Julio, fecha donde sucedió todo en tan solo pocas horas.

El caso fue descubierto gracias a la niñera de la pequeña quien notó que la misma le enviaba mensajes y audios a un adulto. Sus padres no creían lo que estaba ocurriendo, donde no dudaron un minuto en dirigirse hasta el trabajo del imputado en búsqueda de respuestas, pero minutos después de una tensa conversación llegó la policía.

“El teléfono se lo dimos un jueves a la noche para que hablara con su abuela que está en otra ciudad, y al otro día nos encontramos con todo esto. Fue todo muy rápido, menos mal por que no sabemos que pudo haber pasado si no nos enterábamos” comenzó diciendo la madre.

Con relación al material que se consiguió para acusar a la persona, la mujer señaló: “Le hizo tanto psicología que hizo que borre todo y lo hizo. Recuperamos información importante pero no el contenido que le enviaba el”. Además la Federal logró secuestrar elementos que podrá ampliar el chat que supuestamente mantenía con la menor“.

“Le prometía golosinas, a la misma vez le pedía fotos donde ella le decía que no se animaba a sacarse las fotos que le pedía” sostuvo.

Los celulares y computadoras secuestrada en el local y en la vivienda son intervenidas por el área de comunicación de la policía. Mientras la familia espera que la justicia detenga al individuo denunciado.

El “grooming” o “ciberacoso” es el contacto establecido a través de la web de parte de un adulto con un niño, niña o adolescente, y puede quedar en esa instancia donde se puede constituir un acoso sexual; y, si se concreta un encuentro, se pueden dar casos de abusos sexuales.

El artículo 131 del Código Penal dice: “Será penado con prisión de seis meses a cuatro años el que, por medio de comunicaciones electrónicas, telecomunicaciones o cualquier otra tecnología de transmisión de datos, contactare a una persona menor de edad, con el propósito de cometer cualquier delito contra la integridad sexual de la misma.”

Si sos víctima o conoces un caso, podes llamar al 2245443339 abonado de la Guardia de la Delegación Dolores.