En un contexto de crisis económica y social que afecta profundamente a los sectores más vulnerables de Ayacucho, las iglesias cristianas evangélicas están asumiendo un rol social de creciente importancia. Estos templos no solo brindan apoyo material a la comunidad, como alimentos y ropa, sino que también se destacan por ofrecer consuelo espiritual y mensajes de esperanza a quienes enfrentan dificultades.

El pastor Pablo Balbuena, líder de la Iglesia “Adulan”, que proviene de Maipú, compartió con Urgente Ayacucho su experiencia tras organizar una actividad al aire libre denominada “Día de Bendición”. Esta jornada, realizada el pasado domingo en la Plaza del Tanque, tuvo como objetivo acercar la iglesia a la comunidad, especialmente a aquellos que más lo necesitan.

“Vinimos de Maipú con un grupo de más de 40 personas para participar en esta actividad. Hace un año que tenemos una congregación establecida en Ayacucho, y hemos visto cómo nuestra presencia ha sido de bendición tanto para la comunidad como para nosotros mismos”, expresó Balbuena.

Durante el “Día de Bendición”, se repartieron alimentos, ropa, y se organizaron diversas actividades recreativas, incluyendo la participación de payasos que alegraron a los niños presentes. Balbuena destacó que la respuesta de la gente fue muy positiva, con muchas familias acercándose sin prejuicios, disfrutando del evento y recibiendo el apoyo que tanto necesitan.

“El propósito de esta jornada fue sacar la iglesia fuera de las cuatro paredes del templo y llevar el mensaje a la calle, donde la necesidad es más evidente. Vimos a muchos niños felices jugando y compartiendo con nosotros, lo que demuestra que estamos en el camino correcto al acercarnos a la comunidad de esta manera”, añadió.

En Ayacucho, estas iglesias se han convertido en un pilar fundamental para muchas personas, ofreciendo no solo recursos materiales, sino también un lugar de refugio espiritual en tiempos de incertidumbre.