La ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París 2024, celebrada la noche del 26 de julio, tuvo un momento especialmente emotivo con la participación de Celine Dion. La reconocida cantante canadiense, conocida por su poderosa voz y emotivas interpretaciones, hizo su regreso a los escenarios en medio de su lucha contra una difícil enfermedad.

Dion, quien no se presentaba en un concierto desde marzo de 2020 durante su gira Courage World Tour en Newark, Estados Unidos, ha estado enfocada en su tratamiento desde entonces. A pesar de las dificultades que enfrenta, eligió este evento global para volver a conectar con su público, lo que generó gran expectativa.

Desde el primer piso de la icónica Torre Eiffel, bajo los anillos olímpicos de París 2024, Dion interpretó la conmovedora canción “Hymne à l’amour” de Edith Piaf. Su actuación, breve pero impactante, se realizó en una lluviosa noche parisina y fue recibida con una ovación de pie por parte del público.

Este evento marcó el regreso de Dion a un escenario de tal magnitud desde su participación en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Atlanta en 1996, donde interpretó su éxito “The Power of the Dream”. A sus 56 años, la cantante sigue demostrando su capacidad para conmover y cautivar al público.

Dion reveló recientemente que padece el Síndrome de la Persona Rígida (SPS), un raro trastorno neurológico que causa espasmos musculares severos y afecta a muy pocas personas en el mundo. Esta condición ha afectado significativamente su capacidad para moverse y cantar, lo que la ha obligado a alejarse de su carrera musical. En un esfuerzo por crear conciencia sobre esta enfermedad, Dion ha compartido su experiencia personal y los desafíos que enfrenta en su vida diaria.