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“Hace días que no como y estoy buscando trabajo”, dijo el joven que protagonizó un incidente en el Municipio
Según sus declaraciones en una radio local, se encuentra arrepentido por su reacción pero sostiene que está desesperado por conseguir trabajo y comer.
En el marco de la sesión inaugural del Consejo Deliberante de Ayacucho, celebrada el pasado 5 de marzo, un incidente protagonizado por un joven llamado Emilio Anaya. El hecho ocurrió luego de que el joven se acercara al edificio del Palacio Municipal con la intención de hablar con el intendente, quien se encontraba a punto de realizar una entrevista con un medio local tras finalizar la sesión.
El joven se acercó al intendente para solicitarle trabajo, pero la respuesta fue negativa, ya que el mandatario le indicó que debía realizar la solicitud a través de los canales correspondientes del municipio. Ante esta respuesta, el joven, reaccionó de manera impulsiva, arrojando una silla al suelo en un acto de frustración, lo que sorprendió a los presentes. Al salir del edificio, el joven rompió un vidrio en la entrada del Palacio Municipal, lo que generó un estruendoso ruido que alertó a los trabajadores y testigos del hecho.
La policía local intervino en el incidente y comenzó con las acciones legales pertinentes. La versión del joven fue expuesta en un diálogo con la producción de FM 95, donde relató su situación desesperante. Según su testimonio, el joven lleva cinco meses sin trabajo, tras haber trabajado por varios años en la zona rural en varios sectores. A pesar de sus intentos de conseguir empleo, no obtuvo respuestas favorables de las oficinas públicas.
El joven mencionó que, al enterarse de la presencia del intendente en el acto, decidió acercarse con la esperanza de que su situación fuera atendida. En su relato, expresó su desesperación por la falta de empleo y los recursos para subsistir, argumentando que, si no encontraba trabajo, recurriría a la delincuencia. Según él, la respuesta del intendente fue despectiva, al sugerirle que hiciera lo que quisiera. Ante este trato, el joven reaccionó con enojo, rompiendo el vidrio en la salida del edificio.
El joven reconoció que su comportamiento no fue el adecuado y lamentó lo sucedido. Sin embargo, señaló que la falta de respuesta por parte de las autoridades lo había llevado a sentirse ignorado y marginado. También expresó que, a pesar de haber recibido alguna ayuda por parte del municipio, él no estaba interesado en recibir asistencia social, sino en conseguir trabajo. Además, sostuvo que no estaba alcoholizado tal como se mencionó en el lugar.
Por su parte, algunos miembros de la comunidad señalaron que la actitud del intendente podría haber sido más empática ante la situación de angustia del joven. Este incidente pone de manifiesto la creciente preocupación por la situación laboral en la ciudad, donde, según los testimonios, muchas personas atraviesan momentos de desesperación debido a la falta de empleo y el creciente malestar social. La intervención de las autoridades en este tipo de casos sigue siendo un tema de debate, especialmente en lo que respecta a la necesidad de un trato más humano y atento hacia aquellos que atraviesan situaciones de vulnerabilidad.