Recientemente, se inauguró en Ayacucho el Centro de Día para Adultos Mayores, ubicado en la intersección de Avenida Miguens y calle Somigliana, dentro del Hogar de Ancianos San Francisco Javier. Este nuevo espacio lleva el nombre de “Dr. Héctor Daniel Faiella” en honor al recordado médico ayacuchense, quien no solo se destacó profesionalmente, sino también por su compromiso social.
El Dr. Faiella, conocido y querido por su entrega y generosidad, dejó un legado muestra de que los sueño pueden concretarse, sin improtar los desafios. Desde su juventud, enfrentó y superó grandes desafíos debido a una discapacidad motora que, sin embargo, nunca le impidió avanzar en sus estudios de medicina, los cuales realizó en La Plata. A lo largo de su carrera, mantuvo un fuerte vínculo con su comunidad y contribuyó significativamente al bienestar de los adultos mayores y personas con discapacidad en su ciudad.
Luis mencionó cómo su hermano, siendo aún niño, fue tratado como un igual en la familia, lo cual le permitió desarrollar una gran independencia. “Mis padres siempre lo trataron como si no tuviera ninguna discapacidad, como uno más”, compartió Luis, destacando que la inclusión real y el apoyo de amigos y familiares fueron fundamentales en su vida.
El Dr. Faiella superó los desafíos académicos y profesionales con gran esfuerzo, incluso en tiempos en que la infraestructura no estaba adaptada para personas con discapacidad. Aún así, se graduó como médico y luego trabajó en Olavarría y Ayacucho, donde consolidó su carrera y su compromiso social. Luis recordó cómo su hermano ayudaba a otros con discapacidad y tenía una visión inclusiva en el ámbito de la salud. Además, mencionó que a Faiella le gustaba mucho el mar y disfrutaba de Necochea, donde compartía momentos con su familia y amigos.
Durante la ceremonia de apertura, el intendente y el equipo del Hogar de Ancianos descubrieron una placa con su nombre, un momento que Luis calificó como profundamente emotivo. Para Luis, este homenaje no solo honra a su hermano, sino que también destaca su legado de generosidad y espíritu de servicio. Expresó su esperanza de que el Centro de Día continúe siendo un lugar de apoyo para los adultos mayores y recalcó la importancia de que las nuevas generaciones trabajen en pos del bien común, inspiradas en figuras como su hermano.